3.76 mil millones de descentralizados y desconcentrados al Ejecutivo

Eneas De Troya from Mexico City, México, CC BY 2.0 creativecommons.org/licenses vía Wikimedia Commons

Por: Redacción

• 28/01/2022

Y la misma suerte que los fideicomisos siguen ahora organismos descentralizados y desconcentrados.

Al dejar “des-des-centralizar” y “des-des-concentrar”, todo queda en unas solas manos, las del Ejecutivo federal.

Lista para ser presentada en este periodo de sesiones la iniciativa de reforma legal para desaparecer 16 órganos descentralizados y desconcentrados de la administración pública federal y re-adscribirlos a Secretarías de Estado u otras entidades de Gobierno. Con ello perderán la autonomía técnica y de gestión que originalmente fueron las razones y justificantes para su descentralización y desconcentración.

Y eso que quieren mover al elefante blanco.

Además, desaparecerá la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA), a menos de seis años de haber sido creada, dejando cojo al resto del Sistema Anticorrupción del que forma parte.

La división y especialización del trabajo de Adam Smith abrogada.

La iniciativa es necesaria, toda vez que estos organismos fueron creados por ley lo que impide al Ejecutivo su apropiación unilateral.

Sobre los descentralizados, de los que se cuentan siete en la iniciativa, serán los cambios más radicales, toda vez que tienen mayor margen de autonomía y maniobra, a diferencia de los desconcentrados, al no formar parte de las estructuras centrales de las Secretarías, ni depender jerárquicamente de sus titulares, sino que ostentan personalidad jurídica y patrimonio propios.

Importante es resaltar lo de “patrimonio propio”, que dejaría de ser para quedar a la discrecionalidad centralizada. ¡Follow the money!

Así, en la iniciativa se propone que el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) pase a la Secretaría de Gobernación, el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam) y el Consejo Nacional para el Desarrollo e Inclusión de las Personas con Discapacidad (Conadis) a la de Bienestar, en tanto que el Instituto Mexicano de la Juventud (Imjuve), a la del Trabajo.

El Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC) será transferido a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), y el Comité Nacional para el Desarrollo Sustentable de la Caña de Azúcar quedará bajo la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).

El Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) ni siquiera será adscrito a una secretaría, sino a la Comisión Nacional del Agua (Conagua), que es, a su vez, un desconcentrado de Semarnat, hasta ahora.

Por lo que hace a nueve desconcentrados considerados en la iniciativa, pasarán a ser direcciones generales o unidades dentro de las secretarías de su sector o, incluso, dentro de otros órganos.

Los desconcentrados son, la Secretaría General del Consejo Nacional de Población (Conapo), absorbida por el Inegi, único desconcentrado, por tanto, que quedará fuera del Poder Ejecutivo.

La Coordinación General de la Comisión Nacional de Ayuda a Refugiados será parte del Instituto Nacional de Migración; las comisiones nacionales de Seguridad Nuclear y Salvaguardas, y para el Uso Eficiente de la Energía, se integrarán dentro de la Secretaría de Energía, mientras que la Sader quedará dentro de los servicios de Información Agroalimentaria y Pesquera, lo mismo que el de Inspección y Certificación de Semillas.

La Secretaría de Relaciones Exteriores se tragará a la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo, mientras que la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes, quedará en el DIF nacional.

Finalmente, el Instituto Nacional de la Economía Social será un área de la Secretaría de Bienestar, a la que en diciembre pasado ya se había incorporado, como dirección general, el Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol), único que el Ejecutivo pudo eliminar porque fue creado por reglamento y no por ley.

La gran reforma administrativa que tantos años llevó estructuras será, así, borrada de un plumazo.

Pero veamos el “Patrimonio” que dejará ser “propio”. Como los fideicomisos.

A la luz del Presupuesto 2022 y expresados en millones de pesos, los descentralizados consignan en recursos: Imta: 411.4; Inapam: 345.7; Inecc: 225.5; Conapred: 142.7; Secretaría Ejecutiva del SNA: 123.2 (este desaparece, no se centraliza); Imjuve: 115.3; Conadis: 34 y Comité Azúcar: 16.6 mdp.

En tanto que los desconcentrados cuentan con: Agencia Mexicana Cooperación, 895; Instituto Economía Social, 218.2; Comisión Seguridad Nuclear, 103.4; Servicio Información Agroalimentaria, 94.2; Comisión Uso Eficiente Energía, 93; Servicio Inspección Semillas, 75.6; Sistema Protección Niños, 69.9; Conapo, 67.1 (se concentra al Inegi, no al Ejecutivo) y Comar, 45.6 mdp.

En total, 3 mil 76.4 millones de pesos destinados por el poder Legislativo a descentralizados y desconcentrados, serán absorbidos, en su mayoría, por el Ejecutivo federal para su manejo centralizado.

La versión dos de los Fideicomisos.

Con información de Reforma.

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