Internacional


El mundo arde: Enrique Lendo

La sequía es una crisis larvada por décadas; el mundo se seca, a menos que reaccionemos.

#TheBunkerNoticias | El mundo arde: Enrique Lendo
Por: Redacción
  • 06/08/2022

El mundo cambia; su temperatura con él: por primera vez en la historia, Reino Unido superó los 40°C y Portugal alcanzó los 47°C.

Se exacerban las sequías, hay escasez de agua en las zonas rurales y urbanas, y los incendios se intensifican provocando muertes, desplazamientos y cuantiosos daños materiales.

Tan sólo en España y Portugal se han registrado más de 2 mil muertes por causa de las olas de calor.

En la zona metropolitana de Monterrey, sus habitantes llevan meses con racionamiento de agua, hacen filas por horas para adquirir una cantidad limitada del líquido. La Comisión Nacional del Agua ha declarado emergencia en varios municipios del norte del país por la sequía y en Nuevo León se ordenó entregar agua concesionada para uso industrial para usuarios domésticos y urbanos por causa de seguridad nacional.

En las últimas dos décadas la población de la Zona Metropolitana de Monterrey creció casi en 60% y su consumo de agua per cápita superó el promedio nacional. Hoy la sequía ha provocado un déficit en la recarga de las fuentes de abastecimiento, pero la necesidad de invertir en infraestructura para diversificar las fuentes de suministro y adoptar medidas para incentivar el ahorro de agua se conocían por décadas. Fue necesaria la crisis para que reaccionaran sociedad y gobiernos.

Ahora bien, la intensificación de sequías es consecuencia del calentamiento global por el uso de energía fósil para abastecer hogares, oficinas, industrias y transporte, incrementando las concentraciones de gases de efecto invernadero (GEI) por los mismos habitantes de Monterrey, Ciudad de México, Guadalajara y la mayoría de las ciudades en el mundo.

Peor aún, la deficiente planeación territorial ha motivado un crecimiento urbano desordenado que devasta los bosques y otras fuentes de recarga de acuíferos y no regula las tomas clandestinas de agua, exacerbando la vulnerabilidad hídrica.

Y, por si lo anterior fuese poco, las bajas tarifas de agua no incentivan el ahorro, la diversificación productiva o la inversión en infraestructura para el abasto y mantenimiento de redes.

Las consecuencias del cambio climático ya están aquí. El Panel Intergubernamental de Cambio Climático concluyó que el aumento de temperatura seguirá incrementando la frecuencia e intensidad de los fenómenos meteorológicos extremos, incluyendo sequías, siendo vulnerable a ello la mitad de la población mundial.

Urge, pues, que los países reduzcan las emisiones de GEI en 50% al 2030 y las neutralicen en 2050. Además, es fundamental que las poblaciones vulnerables refuercen sus medidas de adaptación al cambio climático.

La ONU estima que actualmente existe un déficit de inversión para adaptación que ronda entre $280 y $500 mil millones de dólares anuales en los países en vías de desarrollo.

México es particularmente vulnerable a los impactos del cambio climático debido a su ubicación geográfica, su topografía y características socioeconómicas. Una quinta parte de sus municipios son vulnerables y se estima que el costo de los daños podría rebasar los mil millones de dólares en 2030 ¡tan sólo en Monterrey, Guadalajara y Ciudad de México!

Nuestra vulnerabilidad demanda cuantiosas inversiones en infraestructura que moderen los impactos de sequías e inundaciones, así como incentivos y reglas que permitan ordenar los asentamientos humanos y las actividades productivas en función del riesgo. Éste sí es un reto que amerita una visión de prioridad y seguridad nacional.

Con información de Enrique Lendo, experto en temas económicos y de desarrollo sustentable, y Reforma.

#TheBúnkerMX
#Sequia
#MedioAmbiente
#Agua
#Usos
#Infraestructura
#Inversion
#SeguridaNacional
#Monterrey.
#TheBunker


Notas Relacionadas