Y seguimos dando tumbos en política exterior.

Nuevamente López Obrador se contradijo e hizo de la Doctrina Estrada un reguilete. Ahora fue contra Colombia y la respuesta no se hizo esperar. El Canciller, no el presidente, tal y como ya había pasado con Panamá, le contestó, sin ambages: "Le solicitamos respetar la autonomía del pueblo colombiano ".

López amaneció ayer con vena internacionalista —e injerencista, según el canciller colombiano— y fiel a su ánimo rijoso que afirmó que hay una "guerra sucia" en contra del candidato presidencial de izquierda, Gustavo Petro.

Poco tardó la respuesta; a través de redes sociales el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia dijo que los dichos de López Obrador constituyen una injerencia desobligante en los asuntos internos de ese país.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia manifiesta su inconformidad por las declaraciones del señor presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, las cuales constituyen una injerencia desobligante en los asuntos internos de nuestro país. (1/3)

— Cancillería Colombia (@CancilleriaCol) June 3, 2022

Colombia, le mandaron decir, tiene un proceso democrático con todas las garantías institucionales para los aspirantes a la presidencia de la República.

"Tanto los que apoyan a un candidato, como al otro, merecen todo el respeto de la comunidad internacional y de altos dignatarios", dijo la Cancillería.

Respeto a la autonomía de Colombia para elegir a su próximo presidente sin injerencias que traten de influir en los electores, reclamó la autoridad colombiana.

"Con el mismo respeto que hemos profesado por las instituciones y por el señor presidente de México, le solicitamos respetar la autonomía del pueblo colombiano para escoger a su próximo presidente sin injerencias que traten de influir en los electores".

Colombia adelanta un proceso democrático con todas las garantías institucionales para los aspirantes a la Presidencia de la República. Tanto los que apoyan a un candidato, como al otro, merecen todo el respeto de la comunidad internacional y de altos dignatarios. (2/3)

— Cancillería Colombia (@CancilleriaCol) June 3, 2022

Todo empezó cuando López Obrador aprovechó la mañanera para hacer campaña en ¡Colombia!: mencionó que Gustavo Petro, candidato de izquierda a la Presidencia de Colombia, enfrenta una "guerra sucia de lo más indigna y cobarde".

"Le mando un abrazo a Petro desde aquí. ¿Y saben por qué lo abrazo? Porque está enfrentando una guerra sucia de lo más indigna y cobarde. Todo lo que ya vimos y padecimos en México".

En su personal versión de la historia, López Obrador dice que Petro ha recibido críticas de los conservadores de que, si se convierte en el presidente de Colombia, ese país "va a ser como Venezuela".

"Lo hago porque si alguien ha padecido, y no exagero y no me siento víctima, de esas guerras sucias, es el que les habla”.

El próximo 19 de junio, Gustavo Petro se enfrentará al empresario Rodolfo Hernández en la segunda vuelta de las elecciones para definir al próximo presidente de Colombia.

Y López en su caso hace del principio de la no intervención un lectura anticonservadora y pro-Venezuela.

Como de costumbre, nuestra Cancilleria calla cual momia.

Con información de La Razón.

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