Mientras el Tren maya cosecha renuncias en Semarnat, la audiencia judicial sobre Tren Maya se aplaza y el Tribunal confirma suspensión provisional, determinando que un permiso provisional no substituye la obligación previa de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA).

Un juez federal en Mérida aplazó para el 27 de los corrientes la audiencia en la que se decidirá sobre la suspensión definitiva de las obras del Tramo Cinco Sur del Tren Maya, de Playa del Carmen a Tulum.

El juez Primero de Distrito en Yucatán, Adrián Novelo, aplazó ayer la audiencia incidental del juicio de amparo 884/2022, según registros del Consejo de la Judicatura Federal.

En dicha audiencia se resolverá si se concede la suspensión definitiva, que estaría vigente durante todo el tiempo que tome el proceso del juicio de amparo. Este es el segundo aplazamiento de la audiencia, originalmente programada para el 22 de abril.

La suspensión provisional otorgada por el juez el pasado 12 de abril sigue vigente para efecto de:

"Que se suspenda o paralice cualquier acto que tenga como finalidad la continuación de la construcción del Tramo Cinco Sur del Tren Maya, de modo que no se permita la ejecución de obras relacionadas con su construcción, infraestructura, remoción o destrucción de la biodiversidad del terreno o cualquier otra actividad que implique su ejecución material".

Dicha suspensión provisional fue impugnada y el Tribunal Colegiado en Materias de Trabajo y Administrativa, con sede en Mérida la confirmó por unanimidad el jueves por la tarde en sentencia firme e inapelable la suspensión provisional, declarando infundados dos recursos de queja del gobierno.

En ese contexto se inscriben las renuncias, toda vez que hasta que no se cuente con la manifestación de impacto ambiental la obra podría permanecer bajo suspensión para evitar daños irreversibles.

El tribunal coincidió en que la obra, a cargo de las empresas Grupo México y Acciona Infraestructuras, no podrá seguir mientras no exista una Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) que cumpla los requisitos legales. Es decir, anulando el decretazo que eximía de permiso alguno la obra.

Como se recordará, el trazo original del tren, paralelo a la carretera 307, fue cambiado por el gobierno y ahora va a través de la selva, lo que ha provocado protestas y amparos de grupos ambientalistas.

El tribunal determinó que una autorización provisional en materia ambiental, otorgada con base en un decreto presidencial para exentar de tramites las obras prioritarias del gobierno, no puede ser considerada como equivalente de una MIA.

El juez Novelo ha otorgado al menos otras dos suspensiones provisionales contra el Tramo Cinco Sur, en los amparos 820 y 821/2022m y según un grupo ambientalista, el pasado 29 de abril concedió una más que abarcaría el Tramo Cinco Norte, de Cancún a Playa del Carmen.

La violación a una suspensión, provisional o definitiva, da lugar a responsabilidad penal de los funcionarios responsables, como delito previsto en la Ley de Amparo.

Tanto el juez Novelo, como el tribunal colegiado, son los encargados de resolver todos los amparos contra el Tren Maya, sin importar en que estado se ejecuten las obras.

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